La guerra comercial iniciada por Donald Trump contra China puede afectar de lleno a una de las compañías tecnológicas más importantes del mundo. En una carta dirigida al representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, Apple apunta que los planes del presidente podrían encarecer parte de su gama de productos y hacerles perder competitividad.
Trump, que se queja de una relación económica desigual entre ambos países, anunció hace semanas su intención de aplicar aranceles de un 25% a la importación de productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares China devolvió la moneda con aranceles equivalentes en el primer episodio de una guerra comercial desatada por el presidente estadounidense.
Aunque tiene su sede en California, Apple fabrica la mayor parte de sus productos en China, de donde los exporta a Estados Unidos. Paradójicamente, esa circunstancia conlleva que la empresa pueda verse afectada de lleno por la imposición a la importación de su propio país. Además, Apple tiene una importante presencia en China, por lo que teme que Pekín apunte sobre ellos a modo de represalia.

Entre los productos susceptibles de verse afectados se encuentran los AirPods (auriculares con tecnología bluetooth) que suponen el 5,6% de las ventas totales de la firma. Su producto estrella, el iPhone, quedaría inicialmente al margen de las consecuencias, pero el viernes Donald Trump redobló su apuesta en la guerra comercial con China.
No solo China se ha visto perjudicada por la política comercial del presidente estadounidense. Trump también ha impuesto aranceles del 25% a las importaciones de acero y del 10% a las de aluminio procedentes de Europa, México y Canadá. Como respuesta, el Viejo Continente ha impulsado tasas a 200 productos emblemáticos de Estados Unidos, entre los que se encuentran el whisky, la mantequilla de cacahuete o los vaqueros de Levi’s.